Freddie es un perfumista autodidacta que vive en el Reino Unido.
Con un trabajo diurno en la industria del tatuaje, tatuando en todo el mundo.
Actualmente con sede en Worcestershire, y un bagaje en todo lo relacionado con la creatividad, el arte y el diseño.
Se ha volcado en la creación de su propia línea de fragancias después de estar obsesionado con ellas durante más de 15 años.
De un modo u otro, ha participado en la comunidad, ya sea escribiendo sobre perfumes o colaborando con otras marcas. La colección de fragancias se construyó en medio de la pandemia, sin poder trabajar en su empleo diario y con la necesidad desesperada de seguir creando.
Le pareció natural que las fragancias girasen en torno a las ideas de los grandes recuerdos, la nostalgia y la necesidad de consuelo.
La falta de comunicación y la pérdida de seres queridos también están representadas en ellas. Su estilo es novedoso, lleno de vida y emoción, pero fácilmente ponible en su tono, textura y toque suave.
Freddie vive con su compañero Patrick, igualmente creativo, su chihuahua Cook y su gato sin pelo (con los pechos seguramente más grandes de cualquier animal) Turkey.